Saludando con sombrero ajeno

Debería de ser obligatorio para quienes entran a la política, el tener nociones básicas de economía, administración e historia.

De economía para entender que no puede un gobierno gastar más de lo debido, máxime cuando la economía no crece y la recaudación

cae por esa misma razón. Tampoco puede seguir endeudándose indefinidamente para mantener un ritmo irresponsable de gastos, muchos de los cuales no ayudan al desarrollo del país, sino que están enfocados al manejo clientelar de los beneficiados para ganar las próximas elecciones.

Deben de tener también los políticos nociones básicas de administración para entender que estamos en la época de las computadoras y que muchas actividades que antes se hacían con determinado número de empleados, ahora pueden llevarse a cabo con la mitad del personal o incluso con menos. Por esa falta de visión, el rubro destinado a salarios crece de manera alarmante en el gobierno, mientras decrece el presupuesto para salud, educación y obra pública.

Hago un paréntesis para narrarles que con frecuencia realizo trámites ante varias dependencias oficiales y observo con preocupación como unos cuantos empleados trabajan intensamente y otros de plano no hacen absolutamente nada, solo platican, comen a todas horas, chatean, juegan con la computadora y matan el tiempo miserablemente, cobrando un sueldo que no desquitan.

Regreso al tema: Los políticos también deben saber de historia, para no terminar cometiendo los mismos errores del pasado.

Que peligroso es poner en puestos  ejecutivos a quienes nunca han administrado nada, ni siquiera la fondita de la esquina.

He mencionado todo lo anterior, porque la actual administración nos está metiendo en un problema que tarde o temprano estallará

generándonos graves consecuencias.

Comento esto, porque muy pocos han dimensionado la crisis que se vive a nivel mundial con las pensiones. Estas se diseñaron con las estadísticas de hace más de medio siglo, las cuales  ahora resultan obsoletas, porque las expectativas de vida se han incrementado notablemente y la edad de jubilación no se ha aumentado. Hay burócratas que se jubilan a los 50 años de edad, después de laborar 30.

Si viven hasta los 80, entre todos debemos pagarles su salario durante sus últimos 30 años, sin que den golpe alguno. No hay economía en el mundo que aguante esto.

Una manera de resolver el problema es aumentando la edad de jubilación.Solo que esta medida es poco política y causará mucha agitación, pero hay que decirlo claramente: no hay de otra.

Existen en diversas dependencias y empresas paraestatales personas que llevan años trabajando como eventuales o por honorarios. Esto es injusto porque carecen de prestaciones, por eso es necesario otorgarles una plaza. Pero hacerlo, sin aumentar la edad de jubilación es irresponsabilidad pura, porque se creará un boquete en las finanzas públicas, mucho mayor del que ya existe.

Hace unos días el presidente de la república ofreció basificar a los trabajadores petroleros  quelaboran como eventuales o por honorarios.Como actualmente el pasivo laboral de esa empresa es más elevando que sus activos, al no tener PEMEX para pagar las pensiones actuales y futuras, nos pasarán la cuenta a todos los mexicanos, quienes de nuestro bolsillo acabaremos pagando esta nueva ocurrencia, porque anunció también el presidente que no se aumentará la edad de jubilación para ese sector.

Me encantaría saber en cuales estudios actuariales se basó el presidente para tomar semejante decisión.

Presiento que no hubo ningún estudio. Solo fue una ocurrencia que a la larga nos resultará muy cara.

Por eso dicen quienes conocen del tema que no deben tomarse decisiones cuando se está eufórico, deprimido o enojado. Las posibilidades de cometer errores se multiplican.

Por eso concluyo: ¡Qué bonito es saludar con sombrero ajeno!. Uno decide gastar y sin consultarnos nos pasa la cuenta a nosotros.

¡Viva México!

No les parece a Ustedes?

Muchas gracias  y buen fin de semana.